Enviar demos a discográficas, claves para tener éxito
El mundo de la música va cambiando a una velocidad de vértigo, especialmente en estos últimos diez años, donde Internet ya se ha masificado y se ha convertido en el principal modo de escucha de música, ya sea a través de plataformas como Spotify, iTunes o incluso Youtube, o de cualquier otro medio en el que podamos encontrar online las canciones de nuestra banda favorita o conocer a nuevos grupos que están aprovechando esas opciones que la red les ofrece para poder llegar mucho más lejos. La industria ya no es la misma que antes, y está claro que hace falta entenderlo para saber dónde nos estamos metiendo, porque hoy por hoy, las discográficas ya no se limitan a hacer promoción y vender discos, sino que han dado un giro en busca de su supervivencia.
Cuando la venta de discos físicos cae en picado y los artistas se concentran en hacer conciertos para ganar dinero, las discográficas han terminado de entender, tarde pero al menos lo han hecho, que no pueden seguir con el mismo sistema que antes. Ahora son empresas 360 que llevan todos los aspectos de la carrera del artista, incluso sus giras, sus apariciones televisivas o sus contratos de imagen. Puede ser algo peligroso para el artista porque es quedar en manos de la propia discográfica por completo, pero también es una oportunidad para que ellos nos abran puertas que serían casi imposibles de abrir por nuestra cuenta. Uno puede tratar de promocionarse en Internet y llegar al mayor número de personas posibles, pero está claro que el poder que todavía siguen teniendo las discográficas nos facilitaría mucho más el camino hacia la cima. Claro que antes hemos de convencerles para que nos fichen, y eso lo haremos enviándoles una demo con nuestra música.